Floridablanca (Santander).

Al sur de Bucaramanga se encuentra Floridablanca, la segunda ciudad  del Área Metropolitana, un municipio con notorio desarrollo en las últimas décadas.

Flecha.
Torre eclesial.
Aviso.
Curioso nombre.

Viniendo de la capital de Santander,  el desvío para ingresar a Floridablanca está en el sitio llamado ‘Papi yo quiero piña’ el lugar donde paran los transportes que van hacia San Gil, Bogotá y el sur del departamento.

Carrera séptima.

La carrera séptima, es la calle de los dulces, donde se ubican las empresas de obleas y demás tentaciones para los turistas que llegan a Floridablanca.

Allí frenan en seco todos los esfuerzos por conservar la línea y comer saludable. Las panelitas de cidra y las brevas con arequipe son irresistibles hasta para los más disciplinados en la mesa.

Almacén.
Almacén de dulces típicos.
Piedra.
Casa de la Cultura.

Sobre la carrera 7 se ubican además algunos hoteles como el que recomendó el taxista viniendo del aeropuerto Palonegro.  

La Casa de la Cultura se encuentra sobre la misma carrera séptima y exhibe a la entrada una roca inmensa que, según se cree, fue la piedra ceremonial de la cultura Guane.

Y en el cruce con la calle quinta se destaca el restaurante La Casona Florideña, donde se sirve un menú abundante y con buena sazón.

Me fascinó la presentación en rectángulo de la sobre barriga-asada. A veces los  recién graduados en gastronomía se exceden en salsas e ilusiones ópticas, pero este no es el caso.

Plato.
Plato provocativo.

Para admirar en la plaza.

Llama la atención que en algunos pueblos de Santander, la galería está justo en el marco de la plaza principal.

También quedan por ahí algunos supermercados como el Más por Menos,  (+ x -), de aviso rojo muy vistoso y fácil recordación.

Galería.
Interior de la plaza de mercado.

Hace poco instalaron en el parque de Floridablanca la escultura en chatarra de un antepasado indígena.

Parece que no todos los habitantes de Florida están de acuerdo con el Concejal Oscar Villamizar, quien mandó colocar la escultura.

Alirio Gómez opina que la obra de arte se esculpió  ‘sin consultar con historiadores y antropólogos; colocaron frente a la alcaldía la estatua de un indio de aspecto violento y en guayuco y la bautizaron como un indígena Guane, “Chanchón».

Según Alejandro Navas Corona los indios Guane no usaban guayuco, sino mantas hasta la rodilla y anudadas en el hombro izquierdo’.

Escultura.
Indio Guane.
Fuente.
Fuente con aves.

En el parque se ve además la fuente decorada con esculturas de aves más las palomas que llegan a beber en la alberca.  

En el costado norte de la plaza, se ubican el edificio de la Alcaldía, ahora en construcción, y el Centro de Bienestar del Anciano, una casa de cuatro pisos, al parecer bien dotada.

‘Luces de Colombia’, es el nombre de una de las fábricas de juegos pirotécnicos y chispitas mariposa, que queda acá en Floridablanca.

Busto.
Otro aspecto del parque.

Ayer pasaron hacia la vereda Helechales, camiones con las partes de un gran Cristo, de 33 metros de altura, llamado el Santísimo, obra del escultor Juan José Covo.

Será una de las atracciones del nuevo parque que la familia de un conocido político y exgobernador de Santander, construye arriba del casco urbano de Floridablanca.

Infortunadamente en las tardes, el Cristo recibe de frente los rayos del sol poniente, lo que impide contemplar en detalle la panorámica de Bucaramanga.

Templo parroquial y Capilla

La iglesia de San Juan Nepomuceno es la iglesia más importante de Floridablanca. Una docena de columnas redondas y blancas, sostienen la cubierta con vitrales sencillos, a  través de los cuales se ilumina el recinto.

Templo.
Interior de la iglesia.
Escudo.
Emblemas a falta de reloj.

Seguramente en el piso había una baldosa antigua, que reemplazaron por cemento de granito.

Lo que sí vale la pena destacar de la iglesia parroquial, son los símbolos que exhiben las torres: en una el escudo episcopal y en la otra, la cruceta que señala los puntos cardinales del lugar. Muy interesante ese detalle y útil para los viajeros.

La Casa Parroquial ocupa el edificio que fue sede del Colegio La Asunción, una construcción agradable a la vista, de dos plantas y con ventanas ojivales.

En el otro costado de la plaza central, frente a la iglesia principal se ve una capilla  de frontis antiguo, decente y de puertas cerradas.

Capilla.
Capilla colonial.

Diálogos con lugareños.

Mi contertulio cree que Floridablanca se sostiene con los prediales, pues últimamente han construido urbanizaciones lujosas que pagan ‘el predial más costoso de Colombia’, según afirma mi interlocutor.

También me entero que en la primera semana de noviembre, se celebran en Florida, las Fiestas del Retorno.

En esas pasa frente a nosotros, Macario, un personaje del pueblo, que vive en el parque y se sostiene de lo que le dan sus paisanos. Ahora se vio tranquilo disfrutando de un cono.

El hombre, de estatura pequeña,  acostumbra meterse trapos por entre la camisa, para simular la barriga que no tiene y, para él, es símbolo de distinción.

Personaje.
Macario, personaje popular.

Me causó mucha risa, cuando el conductor me preguntó que si yo ya tenía listo el local en Florida; el chofer se refería al hecho que algunos paisas llegan a estos pueblos y ciudades a poner venta de ‘todo a mil’, negocios de panadería o confecciones.

Alcaldes de Floridablanca han sido: 2016-2019 Héctor Mantilla y hasta el 2023 es el señor Miguel Ángel Moreno Suárez.

Acá habitan en total 253.000 floridablanqueños, 243.000 en el pueblo y 10.000 en las veredas.

Miércoles 30 de julio de 2014

Germán Vallejo

En este Blog publico relatos de mis viajes por Colombia y Antioquia. Desde el 2004 he realizado viajes, casi siempre solo, con pocos recursos y en transporte público. Estoy convencido que en un día soleado todo se ve más bonito, por lo que prefiero viajarenverano. Bienvenidos.

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