Venecia (Antioquia). 3/3

‘El Jardín del Suroeste’

La iglesia de Venecia es el segundo templo de ladrillo más grande de Colombia, después de la Catedral Metropolitana de Medellín.

El templo tiene detalles llamativos como los capiteles con volutas y las nervaduras que sostienen la cubierta al mejor estilo neo-gótico. Lo que sí no es tan auténtico son los vitrales que lucen ordinarios.

Dentro de la iglesia el arquitecto Luís Fernando Betancur elabora un pesebre con movimientos y al mejor estilo de la arquitectura de la colonización antioqueña. Será un atractivo imperdible para las próximas vacaciones decembrinas.

Hoy se ve mucha gente en la plaza de Venecia y en varios cafés se estacionan patrones con listados y fajos de billetes para pagar jornales a los cogedores de café.

Este año con una cosecha abundante y la carga de café a más de millón de pesos, hacen falta trabajadores para recoger el grano.

El alcalde Oscar Andrés estaba jugando bolley ball en la cancha frente al atrio, cuyas escalas hacen las veces de tribuna, con sombra en la mañana.

Tanto el Café Pilsen como el Bar Central ocupan sendas esquinas en diagonal, en la parte de abajo de la plaza. En ambos establecimientos venden ricos pasteles de pollo con abundante proteína y, oh sorpresa, tienen la música sincronizada, ejemplo que deben seguir en otras plazas de pueblos antioqueños.

Tres parques.

Venecia se caracteriza porque a falta de uno tiene tres parques: el central de estilo pueblerino tradicional, muy arborizado, con una estatua de Bolívar en el centro y una palmera muy alta al frente de la iglesia.  

En el centro de la plaza colocaron una escultura con la cara estilizada de una indígena: La Diosa de los Espejos, del escultor José Cirilo Henao J. Los penachos piramidales de la diosa aluden al Cerro Tusa.

Los otros dos espacios son el Parque de la Cruz y el de los Fundadores, con imágenes de los colonizadores de Venecia del maestro de obra Carlos Maldonado ‘Cochemo’.

Y un dato curioso de Venecia es que fuera de Bolombolo, el otro corregimiento ‘a medias’ es La Mina, pues lo comparte con Fredonia.

En la calle central del poblado estaría la línea imaginaria que marca el límite entre los dos municipios. Bastará dar un paso para cambiar de jurisdicción territorial.

Mirador El Vergel.

En la esquina nor-occidental de la plaza se estacionan los camperos que viajan a las veredas del municipio.

Los domingos únicamente, ‘El Mono’ transporta campesinos hacia la parte alta del pueblo, donde se encuentra El Mirador de la vereda El Vergel.

El pasaje para 50 minutos en ascenso por carretera destapada y en medio de exuberante vegetación cuesta $6.000 por trayecto.

Es fascinante viajar por parajes frescos con casas campesinas, vacas lecheras y vistas asombrosas sobre laderas cultivadas.

Antes de salir el capacete del campero Toyota está lleno con bultos de mercado de los pasajeros o encargos hechos al conductor.  Mientras tanto comenta  un campesino refiriéndose al tapabocas:

‘Eso de la pandemia a mí no me gusta porque uno diario embozalao…’.

Otro le explica a alguien por celular:

‘Sí, ya estamos aquí en el carro, dígale a Gildardo que me espere en el guayacán y que suba en el macho pa’ bajar el mercado’.

Quien no aparece es Andrea, la señora que nos hizo esperar media hora mientras realizaba sus diligencias.

El transporte de ‘El Mono’ llega justo hasta el Mirador con deck cubierto para extasiarse con una vista espectacular, no solo del casco urbano de Venecia, sino las fincas de recreo que rodean el pueblo, las montañas altivas del suroeste antioqueño y el firmamento azul decorado con nubes blancas.

Infortunadamente hasta ahora no hay alojamiento en El Vergel, sería magnífico dormir acá para contemplar el paisaje al atardecer y al amanecer.

Acá habitan en total 13.000 venecianos, repartidos por mitades en el pueblo y en el campo. 

Alcaldes de Venecia han sido: 2016-2019 Ferney Daría Fernández y hasta el 2023 es el señor Oscar Andrés

Lunes 9 de noviembre de 2020