Puebloviejo (Magdalena).

Martes 9 de febrero de 2016

Llegué a este pueblo a un lado de la Troncal del Caribe, a mitad de camino entre Barranquilla y Santa Marta, justo en seguida del peaje y poblado, llamado Tasajera.

IPV
Iglesia parroquial de Puebloviejo.

Varias veces he pasado por acá y solo ahora se me ocurrió caminar los cien metros que separan, la vía troncal de la plaza del pueblo. Menos mal, pues me esperaban vivencias inolvidables.

El sol mañanero pega de frente contra la fachada de la iglesia, recién pintada, decente y de una torre.

N
Niños sin tablet, jugando con cucharas y piedras.

La plaza central no es mayor cosa, casi ni hay parque, solo ocho arbustos que crecen con dificultad, ante tanta brisa como sopla en ese sitio abierto y espacioso.

De entrada empecé a detallar  escenas que me encantaron:

  • dos niños ‘desconectados’, jugando en la acera con cucharas desechables y piedritas;
  • el caballo cochero de lucero en la frente, que con paciencia espera que el amo arrume los ladrillos en el volco.
  • un hermoso gallo de pescuezo colorado no deja de cantar, hasta conseguir el favor de la esquiva gallina.
GC
Gallo canta para conquistar a su pareja.

Siquiera vine, qué cosas maravillosas he vivido en tan poco tiempo.

No hay como visitar los pueblos sencillos, de gente amable y trabajadora.

Wilfrido Ayala Moreno es el nuevo alcalde hasta 2019. Ojalá sí viva acá, pues en estos pueblos pequeños, algunos burgomaestres pasan más tiempo en las capitales cercanas que en sus comarcas.

Busqué la sede de la Alcaldía que está a tres cuadras de la plaza. Es casi la única edificación de dos plantas que hay en el pueblo.

Acá viven 25.000 puebloviejeros,  9.000 en el centro y 16.000 en las veredas.

PP
Pescadores en la playa del mar Caribe.

La pesca y la agricultura son la base de la economía en Puebloviejo. Y es que el mar está ahí no mas, a pocas cuadras de la plaza.

Pensé que esta cabecera  municipal sería deprimente, pero no. El casco urbano fue trazado en cuadrícula perfecta y muchas casas ofrecen sombra al frente, gracias a los árboles que plantaron sus dueños.

HC
Hermosa calle con árboles.

Claro que hay muy pocas cuadras con pavimento y por ende el polvo abunda en algunas calles. Pero vi fachadas bien decoradas o de colores vivos que lucen bien.

Se puede ser pobre, pero tener buen gusto.

Fotografié a un lugareño que ordenaba las redes de un trasmallo.

El hombre muy amable me explicó cómo, cuando las redes están muy usadas, que se ponen de color negro, no son tan efectivas pues el pescado les huye.

TA
Red azul que se confunde con el agua.

En cambio la azul, o blanca, que se confunde con el agua marina, esa sí permite atrapar abundantes presas. Y no solo peces, sino langostas, tortugas marinas y todo lo que se atraviese.

A pie llegué hasta la playa en donde se perdían cordones de olas blancas y espumosas. A esta hora la luz solar permite disfrutar de toda la belleza del mar, cuando la estrella tutelar se levanta a mis espaldas.

Me entretuve fotografiando mi sombra antes que la cubrieran borbotones de ondas.

Luego conversé con los miembros de una familia que fritaban patacones en la calle. El marido se encargaba de pelar los guineos mientras que la señora aplastaba y freía las tajadas.

PAF
Él pela los guineos y ella los aplasta y fríe.

Qué ricura, los vende a solo cien pesos la unidad. Así no estuviera en ayunas, me hubieran sabido delicioso. Tiernos pero crocantes, exquisitos. La que se pierden quienes pasan de largo y no entran a conocer a Puebloviejo.

Hubiera podido pagar más caros los patacones, pero ese es el precio que pueden cancelar los puebloviejeros.

En cambio me deshice en elogios al trabajo familiar, la sazón de la señora y la oportunidad de mercadeo, al ofrecerlos a esta hora del desayuno.

Contraté una moto-taxi que por dos mil pesos me sacó hasta la carretera troncal, justo donde hay varias ventas de pescado fresco o seco. Supe que la conductora era una mujer, cuando me habló con voz cantada, pues usa un casco que le cubre toda la cara.

MC
Marimondas en medio de la carretera.

Qué cosa para si pasan seguido busetas desde y hacia Barranquilla. Esta debe ser una de las vías más turísticas del país.

Varios jóvenes disfrazados de marimondas piden monedas y se cuidan de no traspasar las líneas amarillas, que ‘los protegen’ de ser atropellados por tantos vehículos.

Ahí cerca abordé un bus de Berlinas que me llevó hasta la entrada al aeropuerto Simón Bolívar de Santa Marta.

Sentado en la última silla, pensaba: cuántas historias de amor habrán sucedido en este asiento. Como me pasó a mí hace un tiempo, cuando viajé en sentido contrario, de Santa Marta a Barranquilla.

‘Confieso que he vivido…’.

Germán Vallejo

En este Blog publico relatos de mis viajes por Colombia y Antioquia. Desde el 2004 he realizado viajes, casi siempre solo, con pocos recursos y en transporte público. Estoy convencido que en un día soleado todo se ve más bonito, por lo que prefiero viajarenverano. Bienvenidos.

1 comentario en «Puebloviejo (Magdalena).»

  • el 13 enero, 2022 a las 3:53 pm
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    Una cara distinta a este municipio, pues se hizo conocido por lo que pasó en Tasajera y el camión que explotó. El municipio se ve bonito.

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