Orito (Putumayo).
‘Paraíso amazónico’.
Por mucho tiempo postergué la venida al Bajo Putumayo, por temor e incertidumbre y basándome únicamente en los comentarios que escuchaba antes de la firma de los Acuerdos de La Habana.
Ya en Mocoa entendí que fue un error, acá en el piedemonte amazónico no se ven sino personas serviciales y alegres y una naturaleza virgen encantadora.
Para ir de Mocoa a Orito, al sur-occidente, se pasa por Villa Garzón, donde está el aeropuerto que presta servicios a la capital del Putumayo; Puerto Caicedo y los cruces de Santana (Puerto Asís) y El Yarumo (La Hormiga).
El pasaje para casi tres horas de viaje por carretera pavimentada, cuesta $25.000.
Bonanza petrolera.
Orito tiene menos comercio que otros pueblos del bajo Putumayo, pero es gran productor de petróleo. Su población se incrementó a partir de 1.963 cuando comenzaron a explorarse los yacimientos.
Cerca a las oficinas de Ecopetrol se ve el machín de movimientos incesantes que extrae el crudo desde las profundidades.
Por lo que observo, Orito no es un pueblo pobre, hay muchas ventas de motos, tecnología y salas de belleza.
Algunas calles están semaforizadas y las principales tienen árboles en el separador. ‘La Avenida’ es la vía principal y parte el pueblo en dos, justo por la cresta de pequeña elevación, con la Iglesia y la Alcaldía en la parte más elevada.
Crecimiento atropellado
Orito creció desordenadamente: con frecuencia los peatones se ven obligados a caminar por el pavimento ya que, las aceras con baldosas lisas y peligrosas en invierno, tienen muchos escalones. Así que no hubo una buena planeación urbanística.
Ya escapó pero todo se ve mojado. No hay alcantarillado de aguas lluvias y los pisos de las aceras no tienen el declive suficiente para que drenen, así que es difícil mantener los zapatos secos.
Frente al terminal de transportes está la plaza de mercado. Un vendedor juicioso fue quien impuso la venta de cebolla de rama, no sucia sino limpia. Luego todos sus colegas lo imitaron. La cebolla junca la traen de Pasto después de 12 horas en viaje.
Las manillas tan coloridas que están de moda por estos días, las elaboran mujeres del Putumayo a partir de pequeñas chaquiras que incrustan en hilos de poliéster. En muchos comercios ofrecen esos accesorios con diseños variados.
Piedra Pijilí
El principal atractivo turístico de Orito es la Piedra Pijilí, una gran roca redonda que bañan las aguas del río Orito. La enorme roca de formas suaves descansa en medio de la vertiente y se puede admirar a 15 minutos del pueblo, de paso por Ecopetrol, a la salida para la vereda Caldero.
En la glorieta de la entrada fotografié la estatua del indio con la guacamaya en su brazo, obra de los escultores Jairo Arango y Hernán Bolaños.
La escultura rinde homenaje a los indígenas que poblaron estas tierras antes que Orito fuera municipio.
La que sí no tiene mayor gracia es la iglesia parroquial de una torre y un retablo colonial al fondo.
Por mil pesos un bus urbano me dejó en el restaurante El Sitio, lleno de contratistas a esta hora del almuerzo.
‘Traéme otro postrecito que el que me trajiste me lo comí sin darme cuenta’, le dije a la mesera y claro, me complació de una.
El alcalde de Orito hasta el 2019 es Manuel Eduardo Ocoró Carabalí y hasta el 2023 el señor José Luis Angulo Riofrío
Acá habitan en total 47.000 oritoenses, 20.000 en el pueblo y 27.000 en las veredas.
Viernes 8 de noviembre de 2019
como llego a Orito desde Cali? cual es la ruta recomendada? hay aeropuerto disponible?
Estando en Cali, lo más lógico sería llegar a Pasto, de ahí a Mocoa y después bajar a Orito. La otra ruta sería por Neiva. Saludos.