Ovejas (Sucre).

Ovejas es un pueblo bien interesante por las bellezas arquitectónicas que conserva, como la iglesia parroquial y muchas casas de construcción tradicional bien conservadas. Así que le dedicaré tiempo suficiente a este pueblo sucreño.

Baldosa.
Cuadros ajedrezados.

Arquitectura Patrimonial

El templo de San Francisco de Asís deja ver interesantes decorados originales en la fachada. De estilo ecléctico, exhibe en lo más alto del centro la imagen de San Francisco con una cruz en alto. Hasta el color hueso que tiene ahora el templo le viene bien, frente a detalles resaltados en tono café oscuro.

Iglesia.
Iglesia de San Francisco.
Alcaldía.
Alcaldía Municipal.

El antiguo edificio de la Alcaldía es otra obra importante de la arquitectura ovejera. Nada tiene que envidiarle a construcciones similares de El Banco, Lorica o Mompox. Pide a gritos una restauración, pero se conserva como un edificio sólido, con hermosos balcones en el segundo piso, ventanas con barrotes y un portón central de buena factura.

También fotografié la casa rosada donde funciona ahora el ICBF. Durante los mejores años de Ovejas, esta casa fue residencia de una familia pudiente. El piso en cuadros pequeños de mármol se conserva relativamente bien.

Ventanales.
Casona antigua.
Rombos.
Parte de un alero.

A continuación admiré residencias sencillas pero con techo de zinc elevado para permitir el flujo de aire, y aleros en tablillas de madera formando figuras geométricas especialmente rombos. Son muchas las construcciones de ese tipo que se conservan bien en Ovejas.

Es importante que los lugareños me vean enfocar los aleros, las puertas y ventanas en madera y los pisos de baldosa antigua, para que entiendan el valor cultural de las edificaciones y se esfuercen por conservar su riqueza patrimonial.

Balcones.
Balcones en madera.

Festival de Gaitas

Los primeros pobladores de Ovejas descendían del grupo étnico llamado los Finzenúes. De esa etnia procede la gaita, un instrumento musical rústico pero de gran valor cultural.

En el puente de octubre de cada año se celebra en Ovejas el Festival Nacional de Gaitas, en memoria de Francisco Llirene.

Desde tiempos remotos los ovejeros se reunían para bailar al son de la gaita. Pacho Llirene fue un percusionista que acompañaba a los intérpretes de la gaita. Su habilidad era tal que los bailarines se daban por vencidos cuando él animaba la fiesta, en tanto que Francisco seguía haciendo sonar el tambor, como si nada. Por esa destreza a Francisco Llirene se le llamó ‘el diablo del tambor’.

Piso.
Piso en mármol.

Son muchos los estilos de baldosa antigua que se ven en las residencias de Ovejas. Con diseños originales, baldosas bien valoradas y mejor conservadas.

Incluso se ven casas sencillas de familias pobres pero con arquitectura hermosa. Especialmente me llamó la atención una que se sostenía con muros de palitos entrecruzados, pilares amarrados con bejucos y techo de paja. La puerta en madera y con candado oxidado, le daba un toque espléndido a la entrada.

Puerta.
Residencia tradicional.
Diseño.
Diseño natural y bello.

Y como si fuera poco, hasta en el piso de la calle encontré un diseño de piedritas, hojas, hierba y trozos de cemento que, ni el más hábil diseñador hubiera elaborado con tal belleza. Qué variedad y cuán hermoso se ve ese ensamble natural hecho por el agua lluvia, las pisadas de los lugareños y la brisa vespertina. Me encantó.

Por último llegué en moto hasta el cementerio de Ovejas para fotografiar una tumba aristocrática, con par de ángeles custodios y un ánfora y manta encima, a manera de corona. En puro mármol, seguramente fue traída de Europa por alguna familia rica durante los años dorados de Ovejas.

Tumba.
Mausoleo en Ovejas.

Ñame y Tabaco

Ovejas es un municipio que vive de la agricultura. El Ñame es hoy uno de los principales productos. Estuve en una bodega donde se almacenaban cantidades del tubérculo.

Pero también se cultiva tabaco, aunque últimamente ha decaído el consumo de los cigarrillos a raíz de la ley que prohíbe fumar en lugares públicos. En un parque de Ovejas se erige la escultura con la que se rinde homenaje a las mujeres recolectoras de la hoja.

Ñame.
Tierra fértil para el ñame.
Tabacalera.
Recolectora de hojas.

Menos ladrillos, más lectores

La decepción la tuve en la Biblioteca Municipal donde los funcionarios poco conocen de sus tradiciones y ancestros. Hay muchos libros recientes y bien conservados, mobiliario ergonómico pero casi ningún lector.

Es una lástima que casi todos los municipios de Colombia tienen bibliotecas bien dotadas, con funcionarios financiados por la alcaldía a veces para pagar favores electoreros pero sin mucho compromiso con su labor.

Más que libros, lo que se necesita son papás lectores, bibliotecarios de vocación, profesores apasionados por la educación y llevar los libros a los barrios, sin esperar que los lectores acudan a la biblioteca.

Libros.
(Foto tomada de Internet)

Ovejas fue el nombre de una hacienda que había antiguamente en la zona. Algún obispo quiso que el pueblo llevara el nombre del santo de Asís, pero la idea no tuvo buena acogida y el nombre de San Francisco se reservó para la parroquia.

Da gusto mirar este video de Luis Osorio de las carreras de Caballos en las Fiestas de San Pedro y San Pablo que se celebran en Ovejas, al mejor estilo macondiano, solo que con dron.

https://www.youtube.com/watch?v=oNKfBqkQGvA

El alcalde de Ovejas hasta el 2019 fue Mauricio Gabriel García Cohen.

El alcalde más joven de Colombia: Fredy Orlando Ricardo, fue elegido en Ovejas para el período 2020-2023.

En esta localidad viven en total 21.000 ovejeros, repartidos por mitades, en el pueblo y en las veredas.

Martes 28 de junio de 2016

Germán Vallejo

En este Blog publico relatos de mis viajes por Colombia y Antioquia. Desde el 2004 he realizado viajes, casi siempre solo, con pocos recursos y en transporte público. Estoy convencido que en un día soleado todo se ve más bonito, por lo que prefiero viajarenverano. Bienvenidos.

1 comentario en «Ovejas (Sucre).»

  • el 10 septiembre, 2021 a las 8:49 pm
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    Lleva toda la razón. Acá en la costa la gente que suele ocupar este tipo de cargos son personas que ni siquiera saben del tema y solo están allí por favores de políticos. Es lamentable, pero, por ejemplo, en Montería la gente ni siquiera conoce los nombres de bibliotecas importantes y con un valor educativo enorme. Eso sin hablar del penoso desconocimiento de las tradiciones y cultura del lugar, están mas interesados en lo extranjero y hay un escaso sentido de pertenencia. Las personas creen que ser costeño es hablar con una dicción y acento particular o ser de estas tierras, pero he conocido paisas mas cordobeses que mis paisanos.

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