Somondoco (Boyacá).
Jueves 21 de abril de 2016
El viaje de Guateque a Somondoco dura solamente 25 minutos y el cupo cuesta $5.000 en automóvil colectivo.
Desde cuando se sale de Guateque, se comienza a ver Somondoco allá arriba en la falda de la cordillera.
La carretera baja hasta el puente sobre el río Sunubá, para ascender luego a mi destino, en donde estuve después del medio día. El nombre de la localidad se debe al Cacique Sumindoco, quien gobernaba estas tierras ricas en esmeraldas, a la llegada de los españoles.
Me recomendaron restaurantes especializados en pescado y ubicados a cinco minutos de Somondoco; pero mi prioridad ahora es conocer al máximo este pueblo encantador.
Cerca al Sunubá están las instalaciones de lo que fue la Fábrica de Licores de Boyacá.
Y también se ve la Escuela Normal Superior Valle de Tenza, donde hoy hay reunión de padres de familia.
Somondoco es un pueblo pequeño, pero de gran gusto.
Apenas tiene 4.500 habitantes en total de los cuales en el casco urbano viven solo mil y los 3.500 restantes son campesinos. Pero me encantó este pueblo.
Cómo será que aquí en Somondoco y en el municipio de Tenza el canal Caracol grabó escenas de la telenovela ‘Esmeraldas’.
Esto lo supe porque Alirio, el conductor del Ranault 9 en el cual viajo, es lo más de amable y disfruta informando a los turistas sobre lo que él conoce y al visitante le interesa saber.
Por Alirio, a quien todo el mundo conoce como ‘Chato’, supe que en el cerro de arriba donde se ven unas antenas y se inicia una construcción, es posible observar con cielo despejado, hasta diez pueblos de Boyacá.
Como no había almorzado, me quedé en la parte alta del pueblo para cargar baterías por $6.500 con un delicioso
plato casero.
Primero conocí el Cementerio, con capilla de torrecita cuadrada. No se ve mal, quizá también por el día soleado que hace hoy.
Luego subí a la plaza, de paso por el Coliseo cubierto en donde jugaban algunos niños.
En Somondoco todo es hermoso, los jardines de algunas casas y hasta el parque de varios niveles, para salvar la inclinación del terreno.
En cuanto a delicias gastronómicas, lo típico acá son los ‘chicharrones de cuajada’, para chupar y comer.
Se trata de trozos de queso suave que ponen a cocinar con melaza de panela. Y saben rico.
Las calles de Somondoco son muy limpias, frente a algunas casas construyeron aceras donde crecen matas de flores.
La nomenclatura tiene placas de buen diseño, los avisos de los negocios son estilo vintage y en algunas paredes hay porta-carteles elaborados con mucho gusto.
También fotografié los juegos infantiles que ubicaron a un lado de la Plaza de Toros San Sebastián.
Ya había visto el Pesebre La Alborada que colocaron en las escalas, arriba de la iglesia.
No conocí la iglesia de San Sebastián por dentro, pero debe ser tan bella y delicada como la espadaña que tiene a un lado y al otro una torre cuadrada de buen aspecto.
La Alcaldía y la notaría funcionan en edificaciones modernas, de varios pisos.
El alcalde de Somondoco hasta el 2019 es el señor Germán Ricardo Robayo Heredia.
Su mayor reto será superar la anterior administración que, al decir de los lugareños, no hizo mayor cosa por este municipio.
En cambio la gente recuerda agradecida a quien sí fue un buen burgomaestre: el señor Cristian Fernández Sánchez, quien gobernó entre el 2008 y el 2011.
Bajando hacia el Salitre, se observa la casa inmensa en medio de prados verdes que hizo construir un concejal de Bogotá muy ligado a los hermanos Nule y demás funcionarios cuestionados por la justicia capitalina.
Y al pasar por El Salitre, el conductor esperó hasta cuando fui a fotografiar la fuente salada que le da nombre a este caserío.
Dicen que el chorro que por allí sale nunca se agota y en épocas pasadas de ahí se sacaba la sal, luego de evaporar el agua.
Desde la carretera que asciende a Guateque, se ve muy bien la vereda Vancupa donde existen parcelaciones modernas y fincas de recreo.
En síntesis, vale la pena conocer Somondoco, una localidad pequeña pero con habitantes acogedores y detalles urbanísticos que denotan sentido de pertenencia en sus moradores.
Soy de Chaparral (tol) he visitado 3 veces Somondoco, y coincido con su apreciacion sobre este hermoso pueblo. Buena publicacion. Gracias.
A usted muchas gracias por su comentario, feliz año 2023.